no abres los ojos porque aun sueñas con el cielo.
Aquí estoy contemplándote en esta imagen,
con tanto amor contenido
Este mundo, ahora convulsionado, es hermoso
cuando tú lo veas comprenderás lo bello que es vivir.
Mateo, aun no te puedo abrazar pero imagino tu presencia,
la sangre nunca se equivoca y puedo sentir tu infante olor.
Espero estar a tu lado el tiempo suficiente para verte feliz
Yo, a cambio te entrego, mi corazón, un amor incondicional
sueños de la luna menguante para que sea tu cuna
y mis poemas por escribir, que no es mucho pero lo es todo
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